Cuenca endorreica: qué es, cómo se forman, su evolución y ejemplos

Una cuenca endorreica es una región geográfica donde el agua de lluvia y los ríos que fluyen en ella no llegan al mar, sino que se acumulan en lagos, lagunas, o se infiltra en el suelo, formando a menudo cuerpos de agua salados o zonas pantanosas.

Esto ocurre porque el terreno de la cuenca está rodeado por montañas, colinas, o relieves que impiden que el agua se desplace hacia ríos que desemboquen en el océano. Este tipo de cuencas se encuentran en regiones áridas o semiáridas, donde la evaporación es alta y las precipitaciones son escasas, lo que a menudo da lugar a la formación de salares o lagos salados.

Las cuencas endorreicas se forman a lo largo de millones de años debido a la interacción de varios factores geológicos y climáticos. La formación de estas cuencas generalmente involucra procesos tectónicos, erosión, y sedimentación. Suelen surgir en zonas donde la actividad tectónica ha generado depresiones o hundimientos en la corteza terrestre, como valles cerrados o cuencas rodeadas por montañas. Estas formaciones impiden que el agua drene hacia el mar.

A medida que la lluvia y los ríos erosionan las montañas y transportan sedimentos hacia la cuenca, estos materiales se acumulan en el fondo, creando capas de sedimentos que pueden formar suelos ricos en minerales. Con el tiempo, la cuenca puede profundizarse o expandirse, dependiendo de los procesos erosivos y sedimentarios.

En regiones áridas o semiáridas, la falta de salida al mar combinada con un clima seco significa que la evaporación supera a la precipitación, lo que contribuye a la concentración de sales y minerales en los cuerpos de agua que se forman dentro de la cuenca.

La evolución de las cuencas endorreicas sigue varios pasos:

• Acumulación de sedimentos: con el tiempo, la continua llegada de sedimentos puede hacer que la cuenca se llene parcialmente, alterando su forma y volumen.
• Salinización: en muchos casos, los cuerpos de agua en cuencas endorreicas se vuelven cada vez más salados debido a la evaporación constante, lo que aumenta la concentración de sales.
• Cambios climáticos: la evolución de una cuenca endorreica también está influenciada por cambios climáticos a largo plazo.
• Actividad humana: la intervención humana, como la construcción de presas, la extracción de agua o la agricultura, puede alterar significativamente la evolución natural de una cuenca endorreica.

Cuencas endorreicas en Asia

Asia alberga varias cuencas endorreicas notables, algunas de las cuales son de las más grandes e importantes del mundo debido a su tamaño, biodiversidad, y características geológicas únicas:

• Cuenca del Mar Caspio: se encuentra entre Europa Oriental y Asia Occidental, bordeada por Rusia, Kazajistán, Turkmenistán, Irán y Azerbaiyán.
• Cuenca del Lago de Aral: entre Kazajistán y Uzbekistán, en Asia Central.
• Cuenca del Tarim: en la región autónoma de Xinjiang, en el noroeste de China.
• Cuenca del Lago Balkhash: en el sureste de Kazajistán.
• Cuenca del Mar Muerto: entre Israel, Jordania y Palestina. Es el punto más bajo de la superficie terrestre, y sus aguas son extremadamente salinas, aproximadamente 10 veces más saladas que las del océano.

Cuencas endorreicas en Oceanía

En Oceanía, aunque el continente es conocido por su clima diverso y variado, también alberga algunas cuencas endorreicas interesantes, principalmente en Australia:

• Cuenca del Lago Eyre: en el centro de Australia, en el estado de Australia del Sur. Es la cuenca endorreica más grande de Australia y una de las más grandes del mundo.
• Cuenca del Lago Torrens: también en Australia del Sur, al noroeste del Lago Eyre.

Cuencas endorreicas en América

En América, existen varias cuencas endorreicas distribuidas en diferentes regiones del continente, desde América del Norte hasta América del Sur:

América del Norte:

• Cuenca del Gran Lago Salado: en el estado de Utah, Estados Unidos.
• Cuenca del Valle de la Muerte: en el estado de California, Estados Unidos.
• Cuenca del Lago Chapala: en los estados de Jalisco y Michoacán, México.

América del Sur:

• Cuenca del Salar de Uyuni: en el suroeste de Bolivia.
• Cuenca del Altiplano: en la región del Altiplano, entre Bolivia y Perú.

Cuenca endorreica de la Antártida

La Antártida, a pesar de ser un continente extremadamente frío y cubierto de hielo, también tiene cuencas endorreicas. Estas cuencas son únicas debido a las condiciones extremas del continente y, en su mayoría, consisten en lagos subglaciales o lagos en valles secos que no drenan hacia el océano:

• Cuenca del Lago Vostok: ee encuentra bajo la capa de hielo de la Antártida Oriental, cerca de la Estación Vostok.
• Valles Secos de McMurdo: está en la región de los Valles Secos de McMurdo, cerca de la costa del Mar de Ross.

Cuencas endorreicas en África

África cuenta con varias cuencas endorreicas, muchas de las cuales se encuentran en regiones áridas y semiáridas:

• Cuenca del Chad: en la región del Sahel, al noreste de Nigeria, Chad, Camerún y Níger.
• Cuenca del Salar de Chott el Djerid: en el sur de Túnez.

Cuencas endorreicas en Europa

Europa, aunque es un continente más conocido por sus ríos y mares, también tiene algunas cuencas endorreicas interesantes:

• Cuenca del Lago Neusiedl: se encuentra en la frontera entre Austria y Hungría.
• Cuenca del Lago Trasimeno: está en la región de Umbría, Italia.

La diferencia principal entre una cuenca endorreica y una cuenca exorreica radica en la forma en que las aguas superficiales drenan y su destino final:

• Cuenca endorreica: el agua de una cuenca endorreica se retiene dentro de la cuenca y generalmente termina evaporándose o infiltrándose. Esto a menudo resulta en cuerpos de agua con alta salinidad, como lagos salinos o salares. Las cuencas endorreicas suelen encontrarse en regiones áridas o semiáridas, donde la evaporación supera a la precipitación, lo que contribuye a la acumulación de sales y minerales en los cuerpos de agua.
• Cuenca exorreica: es un sistema de drenaje abierto donde las aguas fluyen hacia un océano, mar o gran lago que tiene salida al mar. La mayoría de los ríos y cuencas del mundo son exorreicos. El agua de una cuenca exorreica fluye hacia el mar o el océano a través de ríos, arroyos o lagos que desaguan en cuerpos de agua más grandes con salida al océano. Algunos ejemplos más conocidos son: La cuenca del Amazonas (desemboca en el Océano Atlántico), la cuenca del Nilo (desemboca en el Mar Mediterráneo), y la cuenca del Rin (desemboca en el Mar del Norte).

Ahora que ya sabes qué es una cuenca endorreica, te recomendamos leer este artículo sobre las Cuencas hidrográficas: qué son, tipos e importancia.

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