Estrés hídrico: qué es, causas, consecuencias y cómo evitarlo

El estrés hídrico o la escasez de agua se produce cuando la demanda de agua potable es mayor al agua disponible durante un período de tiempo determinado. Asimismo, puede darse porque la calidad del agua es tan baja que no es apta para consumo humano. Según la Organización de las Naciones Unidas, 1 de 6 seis personas se ve afectada por esta situación, y se prevé que esta cifra aumente considerablemente. Para el año 2025, mil novecientos millones de personas vivirán en regiones con escasez absoluta de agua, mientras que 2/3 de la población mundial experimentarán estrés hídrico.

A nivel mundial, los países más afectados son los de África Septentrional y Asia, donde los recursos hídricos renovables se extraen por completo cada año, lo que lleva al agotamiento de las fuentes de agua. El acceso al agua potable y al saneamiento es un derecho humano indispensable para la salud y el bienestar. El agua no solo es esencial en el ámbito doméstico, sino también fundamental en diversos sectores de la sociedad para producir alimentos, energía, bienes y servicios, y para mantener la funcionalidad de los ecosistemas. Tal como lo indica el objetivo del ODS 6 (Objetivo de Desarrollo Sostenible) se debe "garantizar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua y el saneamiento para todos".

A continuación te presentamos las diferentes causas del estrés hídrico:

• Extracción excesiva y no controlada de agua dulce de fuentes naturales para la agricultura. La agricultura es uno de los mayores consumidores de agua dulce a nivel mundial. La expansión de las áreas de cultivo y el uso intensivo de riego sin prácticas eficientes ni tecnologías adecuadas resulta en una extracción excesiva de agua.
• Extracción de agua dulce para utilización industrial. La industria también contribuye significativamente al estrés hídrico debido a su alta demanda de agua para procesos de producción, refrigeración y limpieza. La extracción no controlada para uso industrial puede llevar a la sobreexplotación de recursos hídricos locales, reduciendo la disponibilidad de agua para otras necesidades esenciales como el consumo doméstico. Esto incluye a aquella obtenida de la sobreextracción de agua subterránea renovable o la extracción de agua subterránea fósil.
• Los efectos del cambio climático. Se estima que cada 1 °C de aumento de temperatura provocado por el calentamiento global, resultará en una reducción del 20% de los recursos hídricos renovables. De esta forma, el incremento de temperatura esperado en los escenarios climáticos futuros tiene importantes repercusiones en el ciclo hidrológico, global y local. Aquí puedes conocer los Efectos del cambio climático.
• El aumento demográfico y asentamiento. A medida que aumenta la población, crecen las actividades económicas, industriales y la generación de energía eléctrica, y, en consecuencia, se requieren mayores volúmenes de agua.
• La alteración en las cuencas hidrológicas. La alteración de las cuencas hidrológicas a causa de las actividades antrópicas como la deforestación, el avance de la urbanización, y otras acciones que modifican el régimen hidrológico, produce un mayor riesgo de inundaciones en algunas regiones y una menor infiltración y, por lo tanto, menor cantidad de agua.

Te aconsejamos leer este otro artículo acerca de la Sobreexplotación del agua: causas, consecuencias y soluciones.

• Impacto en la salud humana. La falta de un recurso tan valioso como el agua puede llevar a poblaciones a consumir agua contaminada, de mala calidad y adquirir enfermedades gastrointestinales, cólera, fiebre tifoidea, hepatitis A, entre otras. Asimismo, la escasez de agua produce la disminución de la higiene personal aumentando el riesgo de contraer y transmitir enfermedades infecciosas y parasitarias.
• Impacto en la seguridad alimentaria y escasez de alimentos. La escasez hídrica puede llevar a la falta de riego y por ende a la disminución del rendimiento de los cultivos lo que resulta en una escasez de alimentos. Aquí podrás leer sobre la Escasez de alimentos: qué es, causas y soluciones.
• Impacto en la ganadería. La falta de agua para hidratar al ganado resulta en una mayor mortalidad de animales y en la falta de producción de carne y otros alimentos como la leche.
• Conflictos internacionales. Debido a la escasez hídrica han surgido enfrentamientos políticos e incluso armados entre diferentes comunidades, países y regiones.
• Desplazamientos humanos forzados. El estrés hídrico obliga a las personas a migrar forzadamente, sobre todo aquellas que habitan en sitios donde la cantidad y calidad de agua no son suficientes. Este hecho los lleva a abandonar sus hogares en busca de mejores condiciones de vida.
• Degradación de ecosistemas y biodiversidad. Al igual que las personas migran, algunos animales se ven obligados a desplazarse en busca de recursos hídricos. A su vez, a causa de la disminución del caudal de agua, muchas especies acuáticas de flora y fauna se ven afectadas debido a que algunas de ellas dependen pura y exclusivamente de la misma para poder reproducirse. Te recomendamos leer este otro post sobre la Degradación ambiental: qué es, causas, consecuencias y ejemplos.
• Impacto económico. Sectores como la agricultura, la industria y el turismo pueden verse gravemente afectados por la escasez de agua, llevando a pérdidas económicas significativas.
• Impacto en el tratamiento de aguas residuales. La falta de agua también puede afectar el funcionamiento de plantas de tratamiento de aguas residuales, lo que lleva a la contaminación de distintas fuentes y al aumento de problemas de salud pública.

Para evitar el déficit de agua es crucial implementar una gestión sostenible y eficiente de los recursos hídricos y esto incluye:

• Promover tecnologías de riego eficientes en la agricultura como el riego por goteo, que reduce significativamente el desperdicio de agua.
• Mejorar la infraestructura de suministro y distribución de agua en áreas urbanas para minimizar las pérdidas.
• Promover la conservación y restauración de ecosistemas naturales como humedales y bosques que juegan un papel vital en la recarga de acuíferos y la regulación del ciclo hidrológico.
• Fomentar la implementación de normativas que controlen la extracción excesiva de agua.
• Impulsar campañas de sensibilización y concienciación pública sobre el uso responsable del agua, asegurando su disponibilidad a largo plazo.
• Estimular la cooperación entre gobiernos, comunidades y sectores privados es imprescindible para desarrollar e implementar estrategias integrales que aborden el estrés hídrico de manera efectiva y sostenible.

Si quieres aprender más, te recomendamos leer estos otros artículos sobre Por qué es importante cuidar el agua y Cómo podemos cuidar el agua.

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